Parte del centro histórico, el barrio está delimitado por Vía Layetana, el Parc de la Ciutadella, Plaza Urquinaona y la Barceloneta. Es el barrio de moda de la ciudad y tiene un encanto muy especial. Sus callejuelas medievales están llenas de tiendas de diseño, cafés, restaurantes y bares modernos que atraen al público más chic. Culturalmente, la zona está representada por la basílica gótica de Santa María del Mar, el Palau de la Música y el Museo Picasso.